viernes, 12 de marzo de 2010

Pueblo Nuevo, el más pequeño de los municipios del Estado de Guanajuato

Localizado a menos de quince kilómetros al sur de Irapuato llegamos a Pueblo Nuevo, lugar que apaciblemente sigue la vida, enfocado a la industria agrícola. Este es el municipio más pequeño del estado de Guanajuato, cuenta con apenas 60 kilómetros cuadrados, lo cual significa el 0.020% del total del territorio estatal, lo cual no le resta importancia, sino, más bien, le da el carácter de que a pesar de su pequeñez sigue sobresaliendo en el estado. Un ejemplo de esa vida apacible la vemos en esta toma del Jardín Principal con su kiosco y al fondo la Parroquia de San Antonio Abad.


En Pueblo Nuevo todo queda cerca, asi que llegamos a la Terminal de Flecha Amarilla y enfilamos al centro pues era el tercer día de la feria, se sentía ya el espíritu de fiesta, la música ya se oía y nos encontramos con esto que llama la atención, la memoria de los XIX Juegos Olímpicos, México 68, evento que nos dejó marcados a muchos.


Y el paso del tiempo se siente en Pueblo Nuevo, lugar limpio y tranquilo que, lamentablemente, no conservó las casonas aquellas propias de principios del siglo, le apostó un poco a la “modernidad” y aquí los resultados.


Y estamos en el Novenario a la Virgen de la Candelaria, lo cual significa mucha música y mucho baile en la noche, aquí vemos que en el kiosco ya se preparaba la banda para tocar al mediodía, al fondo las cúpulas de la Parroquia.


Mira nada más que detallazo, en una pequeña fonda, entre el Jardín y la Parroquia están dispuestas las mesas para comer y el adorno, para sentirnos en casa, una jaula con canarios.



Y a medida que caminamos por el pueblo de Pueblo Nuevo nos damos cuenta de que eso de la fiesta y la música se lo toman en serio, esta es una de las muchas bandas que ofrecían sus servicios alrededor de la Plaza donde por la noche sería el baile.




Y si hay fiesta y hay feria, deben haber puestos con todo tipo de vendimias, pan de huevo, ese lo traen de Tlaxcala, ahora con los agregados de las tinturas que los hacen más atractivos, sombreros y cintos pitiados son esenciales en estas zonas de ambiente campirano.


Pero no todo está perdido, encontré una casa que aun guarda sus detalles del pasado esplendor que hubo en todas las poblaciones de Guanajuato, lamentablemente en vías de desaparición en aras de la modernidad.


Y estamos en el Bicentenario, y con él y sin él, siempre nos encontraremos en cada una de las poblaciones de México un monumento a don Miguel Hidalgo y Costilla y Gallaga, el Padre de la Patia.


Algo que me gusta y siempre me gustará es la explosión de color que encontramos por todos lados. Colores charros, si quieres verlos así, pero a mi gusto, son maravillosas expresiones de la llamada “Arquitectura Vernácula”.


Más color. Ahora lo que vemos es el carro alegórico que se usará esa tarde en el desfile procesional por el Novenario a la Candelaria, estas aves algún significado tendrán, lo veremos más tarde.


Por si no lo sabes, los colores están establecidos de acuerdo a la celebración, así, cuando veas los adornos azul y blanco es porque el festejo es para alguna de las 60 Advocaciones a la Virgen María.


Este no es un arco triunfal, todo lo contrario, es el arco que nos indica desde los límites del pueblo, que más al fondo, dos cuadras apenas, está el cementerio municipal.


Y mira que maravilla, solo que no creas que es otra casa, es la misma que vimos antes, solo que el león era sobre la puerta de entrada y estas son las ventanas, estupendas, no cabe duda.


Las cúpulas de la Parroquia recibían su último toque de pintura para que estuvieran de acuerdo a la celebración que se desarrollaba.


La torre de la Parroquia, sencilla elegante y simbólica, lo más importante, con el reloj que si funciona.


Vestigios del pasado encontré en la cancha de futbol de la unidad deportiva, esta banca, típica de los jardines y parques, de las que se usaban en los años 40 y 50. La que vemos es la donada por don Agustín Arroyo Ch, que fuera gobernador de Guanajuato en los treinta y Secretario de Gobernación en la administración de Lázaro Cárdenas. Nacido aquí en Pueblo Nuevo; la Ch es por Chagoyán.


Seguimos encontrando color, esta vez en el confeti y los huevos decorados y llenos también de confeti.


Y como estamos en fiesta, en las calles se cuelga el papel picado, que ahora es de plástico.


Ya por la tarde nos preparamos para ir a la procesión, se alistan los carros alegóricos, al fondo una escena de Señora Santa Ana y, sin faltar, los vendedores ambulantes que nos ayudan a esperar con más tranquilidad la hora en que comience la procesión.


Y comienza la procesión. Música, flores, cuetes y peregrinos, imprescindibles para que luzcan aún más.


En esta explosión de color vemos el carro alegórico del Niño de las Palomas, escena en verdad imborrable, sobre todo porque a lo largo del recorrido el niño nunca perdió el equilibrio, y siempre mantuvo la actitud del personaje, eso lo pude notar ya que seguí todo el recorrido de la procesión.


Hora de reposar, fue mucha fiesta, mucha peregrinación, mucha música y luego seguirá mucha misa y mucha comida, así que mejor reposemos y si estás ya planeando a donde ir en los próximos días de vacaciones, será bueno que pienses que en Guanajuato hay miles de lugares que ver y descubrir, Pueblo Nuevo, uno de ellos.




5 comentarios:

  1. Benja:

    La casa de "las bolas" esferas de cantera con el león enmedio de la puerta principal, es la de mis bisabuelos maternos. Es la casa de Don Germán Ramos Solís y Antonia Rivera Mota. Padres de mi abuela. Nosotros vivimos en lo que fué la parte de atrás de la casa con salida a la calle allende. En esa casa se existió la Gran Fábrica de Cigarros de Don Germán Ramos. Fué la "Botica Ramos" y también tienda de productos. Se hacía Vino de Membrillo y de Anís y era mi bisabuelo, gran emprendedor. La casa fué dividida en dos. Cosa que no debe suceder en México porque destruye y no conserva. Afortunadamente en la actualidad es la casa de mi tía. Una sola dueña como debió ser. Por dentro, es de arquería y con patio en el centro. Huerto y demás cosas de las casas coloniales. La casa es enorme, mide de fondo noventa metros y es muy amplia en la parte de atrás.

    Desafortunadamente todo Pueblo Nuevo es en verdad "nuevo" en la actualidad. No es el pueblo en el que crecí y eso ha sucedido en los últimos treinta y cinco años. En ese poco tiempo lo hemos destruído. El pueblo era empedrado completamente de las banquetas y callejones. En 1977 y gracias a nuestros gobernantes de fuera, le quitaron todo el empedrado y pusieron el pavimento horroroso que ahora tenemos. En poco tiempo, se ha convertido en un pueblo caluroso y feo. Todas las construcciones de antaño han sido demolidas y vuelto a contruír con lo que actualmente has visto. Planchas y cuadros de concreto, supuestos jardines y balcones horrorosos, plastas de concreto en vez de tejados y coches que corren sin respeto alguno al peatón. Se han acabado por coompleto, los tejados de teja colorada. Todas las casas de la zona centro, las han dividido y reconstruído dejando un pueblo con estilo "moderno horroroso". Si vieras las fotos de antaño, te darás cuenta que nuestros antepasados, tenían mejor visión y estilo en hacer las cosas. Y eso que no existían las facilidades que hay ahora para construír. Es una verdadera tristeza. Pronto se convertirá, en un pueblo con criminalidad y sabrá Dios que más. Existen en la actualidad, muchas tiendas de gente que sabrá Dios de donde serán. Está pasando algo así como en la ciudad de Guanajuato, que las tiendas son de gente de toda la república que no tiene amor a su tierra. En fin, no sigo más porque es deprimente.

    Saludos cordiales,

    Alfredo.

    ResponderEliminar
  2. Benja:

    Olvidé decirte que la parroquia de San Antonio es en honor a San Antonio de Padua, no a San Antonio Abad. También, el monumento a Don Miguel Hidalgo no es muy antigüo que digamos, yo era niño cuando lo erigieron y era de bronce muy bonito. La ambición de alguno de nuestros gobernantes que al terminar su ciclo, lo reemplazó con el de cantera. ¿Qué pasó con el de bronce? Quien sabe.

    ResponderEliminar
  3. Estimado Alfredo:

    Gracias por compartir tus buenos recuerdos de cuando el pueblo de Pueblo Nuevo era un auténtico pueblo.

    El consuelo del ahorcado es que, en el Estado de Guanajuato por San Miguel de Allende, Guanajuato capital y Dolores Hidalgo se ha hecho mucho y están quedando cada vez mejor con su sabor auténtico y original. (fuera de los letreros en inglés de San Miguel).

    Pero de los demás municipios, ¿que te puedo decir? tu has visto como los han dejado, el mejor (peor en este caso) ejemplo es Salamanca en donde fuera de una majestuosa casa (la del "Inquisidor"), nada, absolutamente nada ha podido sobrevivir.

    Saludos

    ResponderEliminar
  4. Oye Benjamín, tus artículos están bien interesantes todos, pero tengo una pequeña duda, mira a nosotros en la primaria nos decían que el municipio más pequeño del Estado de Guanajuato era Santiago Maravatío, por cierro de ahí soy, y que la cabecera municipal más pequeña era Atarjea, ¿Qué hay de cierto?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Victor, Gracias por tu comentario. Publiqué, creo que en el blog "El Señor del Hospital" que es sobre historia regional, el comparativo de los municipios, en efecto, Maravatío es el más pequeño territorialmente, y Atarjea sigue siendo la cabecera municipal de menor población en todo el estado. Es cosa de ver los resultados del Censo de 2010 y su proyección al 2015, dudo haya modificado ese lugar 46 de Atarjea.

      Eliminar