lunes, 11 de marzo de 2013

El Santo Desierto de Nuestra Señora del Carmen de los Montes de Santa Fe. Cuajimalpa, Ciudad de México.

   Día 37 de este, digamos, santo recorrido que vengo haciendo. La santidad la presumo debido a que hemos visto una buena cantidad de conventos por Michoacán, Hidalgo y, ahora, en la ciudad de México. Estamos en los límites de la mancha urbana, la región en donde el bosque ha sido respetado y lo único que por ahí se ha construido en varios siglos es este convento que fuera de los frailes carmelitas. Nos encontramos en el Desierto de los Leones, curioso y extraño nombre que se le dio a la zona desde hace varios siglos.

   Cuando leemos la palabra desierto, en automático se nos viene a la cabeza la idea de una zona en donde solo hay dunas y, en el mejor de los casos, algunas palmeras y tal vez algunos cactus, pero en este caso específico del convento debemos entender la otra acepción, la de que es "un lugar despoblado o vacío de gente", así pues, por estas desérticas soledades los frailes descalzos establecieron su casa el 23 de enero de 1606.

   Siendo esta una zona boscosa quiere decir que abunda el agua, más abundaba en ese siglo XVII y la humedad, aunada a una construcción no del todo sólida más un temblor ocasionó que, para finales de ese siglo, el convento se viniera abajo. Fue entonces que se comenzó a construir uno nuevo, era el año de 1705.

   El apelativo de los Leones es otra de sus peculiaridades por si lo del "desierto" no fuera suficiente. Leones,  felinos, no los hay ni los hubo tampoco. Dicen que estos frailes que al poco tiempo de establecerse en la Nueva España comenzaron a hacerse de propiedades, al no ser conveniente que ellos se dedicaran a esas tareas mundanas que los distraían de sus santos desiertos, tenían contratada a una familia de apellido León que eran, por así decirlo, sus representantes legales ante la Corona Española.

   Dicen que el frío fue la razón por la cual los carmelitas descalzos abandonaron este convento. Yo creo que no solo el frío, sino la humedad y esa abundancia de agua, además de las secularizaciones, lo que los obligó a deshacerse de esta propiedad, la cual ahora se muestra como espacio cultural, dejándonos ver la ruinas de lo que, seguramente fue una espléndida construcción propia del barroco y de la exquisitez de los recintos de los hijos de Nuestra Señora del Monte Carmelo. He aquí las tomas que hace algunas horas hice allí.



























4 comentarios:

  1. Un lugar de ensueño, Saludos, Benjamin. Por cierto Benjamìn,¿ algún libro qué me recomiendes sobre la historia de Guanajuato, què tenga fotos antiguas?.

    Gracias. Saludos!

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    1. Gracias por el comentario. La verdad no se de un libro que contenga el tipo de fotos que mencionas ya que sobre Guanajuato todos los libros que he consultado son textos solamente. La editorial del Gobierno del Estado de Guanajuato, "Ediciones La Rana", tiene ejemplares excepcionales, pero de fotos actuales de los templos y algunos monumentos, pero de algo antiguo recuerdo haber visto solamente sobre la inundación de 1903, pero de otro más no. Saludos

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  2. hola Benjamin Arreondo, fíjate que se esta llevando a cabo una obra en el desierto de los leones por la noche llamada Historias Nocturnas en el Desierto de los Leones, por mi parte yo quisiera saber mas sobre la historia de los carmelitas descalzos o dime donde puedo comprar un libro gracias de ante mano tu amigo roberto

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  3. Quizá en: Muñoz Jiménez José Miguel,Arquitectura Carmelita (1562-1800), Ávila, Miján-Artes Gráficas.

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